Ateca es la segunda población más grande de la comarca de Calatayud y parece que fue poblada por bereberes, y aún conserva ciertas características islámicas en sus construcciones como pasajes cubiertos o callejones sin salida. Dos edificaciones son significativas del mudéjar aragonés en Ateca: la Torre del Reloj y la Iglesia de Santa María.
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La Torre del Reloj fue construida por el maestro Domingo y el morisco Ameçot en 1560. Es un antiguo torreón medieval de planta cuadrada de dos cuerpos con un remate octogonal con chapitel acampanado y un óculo en cada una de las caras. En el siglo XVI se levantó sobre él un cuerpo de campanas. El primer cuerpo es liso y en el segundo cuerpo se encuentra el reloj y las demás caras tienen arcos de medio punto, con decoración de ladrillo con rombos y esquinillas. El castillo en el que se encuentra la Torre del Reloj de Ateca alberga actualmente una hospedería.
Por su parte, la iglesia de Santa María de Ateca es de nave única, con ábside poligonal de siete lados. Entre los contrafuertes se ubican las capillas, las que dan al ábside se conservan como en origen y el resto fueron cambiadas en el siglo XVIII. Una bóveda de crucería cubre la nave central en los dos tramos primeros, el último con bóveda de crucería estrellada. El exterior es de piedra sillar y ladrillo.
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La torre se construyó en el siglo XIII, y la parte mudéjar de la iglesia corresponde al siglo XIV. En el siglo XVII se sustituyeron las cubiertas de las capilla laterales y se edificó el segundo cuerpo de la torre. Las siguientes modificaciones hicieron que la torre quedara adosada a la iglesia y quizá el cuerpo barroco de ésta esté sustituyendo a uno mudéjar. La iglesia de Santa María de Ateca fue declarada Bien de Interés Cultural en el año 1985.
La restauración de la iglesia de Santa María de Ateca llevada a cabo en 2012 sacó a la luz restos de arte mudéjar en Aragón, de hecho, descubrió el conjunto de pinturas más antiguo que se conserva de esa época en la Comunidad aragonesa (del siglo XIV). Los trabajos consistieron en descubrir la decoración mudéjar, consolidar la estructura el edificio y limpiar la policromía de la decoración mudéjar, entre otros.
